- Tras cinco años de batalla judicial, la Fundación Villacisneros ha conseguido que la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, dé inicio al juicio oral contra los terroristas García Gaztelu y Gallastegui Sodupe por el asesinato del concejal del PP Manuel Zamarreño
- La apertura del juicio coincide con el 29º aniversario del asesinato de Gregorio Ordóñez a manos del propio Txapote.
La Fundación Villacisneros celebra la apertura del juicio oral contra Francisco Javier García Gaztelu, conocido como “Txapote”, e Irantzu Gallastegi “Amaia” por su participación en el asesinato del edil popular Manuel Zamarreño. Un acto que coincide con el aniversario del asesinato por parte del propio Txapote de Gregorio Ordóñez, concejal del PP, que supuso una gran conmoción por el especial carisma de Ordóñez y lo cruento del acto (fue disparado por la espalda mientras comía con su equipo). La apertura del juicio ha sido posible gracias a la acusación particular de Naiara, la hija de Zamarreño, asesorada por la Fundación Villacisneros.
Zamarreño fue víctima de un atentado con una moto bomba, detonada a distancia por un comando conformado por García Gaztelu e Irantzu Gallastegi, Amaia, cuando el edil salía de comprar el pan. La cronología del procedimiento judicial se remonta a 2020 cuando se dicta auto de procesamiento contra Txapote y queda pendiente el de su acompañante. Tras las diligencias de investigación, se cierra el sumario en septiembre de 2022, y la Audiencia Nacional ordenó la apertura del juicio oral que da comienzo mañana día 24.
Txapote, en prisión desde 2001, acumula varias condenas por su participación en al menos 13 asesinatos, con una total de 603 años de cárcel solo por delitos de sangre. Entre ellos se encuentran dos de los atentados más famosos de la banda terrorista: el asesinato de Miguel Ángel Blanco y el del concejal popular Gregorio Ordóñez, que justo celrebra su 29 aniversario
Miguel Ángel Blanco fue secuestrado y brutalmente asesinado por Txapote, un crimen con el que la banda terrorista buscaba presionar al gobierno español en el contexto de las negociaciones de paz. Su secuestro conmocionó a la sociedad española, y generó una oleada de repulsa nacional e internacional. El posterior hallazgo de su cuerpo sin vida conmocionó aún más a la opinión pública, marcando un punto de inflexión en la percepción del terrorismo en España y avivando el rechazo generalizado hacia las acciones violentas de ETA.
En los casos de Miguel Ángel Blanco y Gregorio Ordóñez sus asesinos han recibido condena, una suerte que no han corrido otros 370 casos que quedan por juzgar y por los que la Fundación Villacisneros lucha desde su constitución tal y como señala en una entrevista en la sede de Fundación Villacisneros la viuda de Goyo, como lo conocían sus allegados, Ana Iríbar, que estos días ha presentado la exposición ‘La vida posible’ por varias ciudades de España, en homenaje a la memoria de su marido. “Tengo puesta toda mi confianza en las nuevas generaciones; necesito vivir con esperanza” añade Iríbar. Una motivación para la Fundación, comprometida en la apertura de otros casos como los de Francisco Arratibel o Carlos Díaz Arcocha.
Mar Blanco, hermana de Miguel Ángel Blanco, pone también el foco en la Ley de Memoria Histórica, “es el mayor insulto, no sólo para las víctimas, si no para la inmensa mayoría de los españoles. Una ley que obvia por completo quién fue la banda terrorista y quién fueron las víctimas”. “Hay un intento de blanqueamiento del terrorismo de ETA” sentencia la hermana del político del PP en una entrevista que puede ver aquí completa.
