El pasado cinco de junio un grupo de “Amigos de la Fundación” acudió a visitar la Academia General Militar de Zaragoza en una jornada inolvidable en la que recorrieron las instalaciones de esta prestigiosa Institución en compañía del Coronel Gonzalo Escalona que les acompañó en todo momento durante la visita que se prolongó por varias horas.
Los miembros de la Fundación Villacisneros, Iñigo Gómez-Pineda, Rocío Fagalde, Iñigo, Rocío y Belén Gómez-Pineda, María San Gil, Ana Velasco, Diego Gómez-Pineda, Ramón Suances y Julián García Somoza llegaron a Zaragoza a las diez y media de la mañana y acudieron en primer lugar a visitar la Basílica de la Vírgen del Pilar, emblema de la ciudad y de toda España y patrona de Zaragoza, de Aragón y de la Guardia Civil.
A continuación se desplazaron a la Academia General Militar en la que les aguardaba el coronel Gonzalo Escalona quién les acompañó en el recorrido por las instalaciones. Tras ser recibidos por el director de la Academia, el general Jerónimo de Gregorio, y de la proyección de un video que narra la historia de la Institución, visitaron las estancias más representativas del edificio histórico como el salón de actos, la biblioteca, el museo, la sala de banderas, que conserva la enseña que donó la regente María Cristina y sobre la que cada año juran fidelidad a España las nuevas promociones de Cadetes. También visitaron la enfermería y la peluquería, que conservan todo el sabor de épocas pasadas así como la habitación que ocupó el Rey D. Juan Carlos en los años en que se formó en la Academia y que se mantiene intacta, tal y como él la dejó. Por último, los “amigos de la Fundación” recorrieron el pasillo en el que se encuentran todas las orlas de la tercera etapa de la Academia –iniciada en 1940 y que se prolonga hasta la actualidad.
Posteriormente, se celebró una comida en la que el grupo mantuvo una distendida charla con el coronel Escalona quién les narró como funciona actualmente la Academia, se alabó la grandeza de la vocación militar, se analizó la situación actual del Ejército y de España y se contaron anécdotas y sucesos de la prolija historia de la Institución.
Para los miembros de la Fundación Villacisneros que acudieron a esta visita fue un día especial y emocionante que recordarán siempre. Iñigo Gómez-Pineda, su presidente, destacó que la Fundación Villacisneros lleva a gala su patriotismo y sabe que nadie como los militares representa mejor el espíritu de servicio y el amor a España, imprescindibles para garantizar la unidad y la libertad de la Nación. Durante la comida realizó un brindis en el que citó a los tercios de Flandes: “Por España y el que quiera defenderla honrado muera, y el traidor que la abandone no tenga quien le perdone, ni en Tierra santa cobijo, ni una cruz en sus despojos, ni la mano de un buen hijo para cerrarle los ojos.”