Tras cinco años de batalla judicial, la Fundación Villacisneros ha conseguido que la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, dicte Auto de apertura de juicio oral contra los terroristas García Gaztelu y Gallastegui Sodupe por el asesinato del concejal del PP Manuel Zamarreño.

24 años después del asesinato en Rentería de Manuel Zamarreño, gracias al tesón de su hija Naiara y a la asistencia letrada de la Fundación Villacisneros, la Audiencia Nacional ha decretado finalmente abrir juicio oral contra los presuntos autores de su asesinato. Para la Fundación Villacisneros “supone una magnífica noticia que nos reafirma en la necesidad de que el Estado de Derecho jamás debe bajar la guardia en defensa de la ley y en la persecución del delito”.

Uno de los pilares de la Fundación Villacisneros es trabajar por las víctimas del terrorismo y como primer objetivo con la voluntad de colaborar en poner fin a la impunidad de los más de 350 asesinatos de ETA sin autor conocido. A tal fin, “a través del proyecto “Dignidad” ofrecemos la asistencia letrada necesaria para intentar reabrir los casos que fueron cerrados sin identificar a los autores materiales de estos crímenes. Es una tarea complicada ya que muchos sumarios han prescrito y no resulta sencillo interrumpir la prescripción o aportar nuevas pruebas, pero, en ocasiones como la presente, el esfuerzo concluye con éxito”.

A la vez que “manifestamos nuestra felicitación y agradecimiento a Naiara Zamarreño por su valentía y por la confianza depositada en nosotros, queremos aprovechar la satisfacción por la conclusión de este sumario para insistir en seguir ofreciendo nuestra ayuda.

Las víctimas del terrorismo reclaman de manera permanente unas demandas que nosotros compartimos: Memoria, Verdad, Dignidad y Justicia. Sin justicia no hay reparación del daño causado, por eso volvemos a insistir en este llamamiento público para ponernos a disposición de todos los las víctimas del terrorismo de ETA para que, superando el dolor que supone rememorar el asesinato de sus familiares, confíen en la Justicia e intenten evitar una impunidad que solo favorece a los criminales y a quienes quieren imponer un falso relato sobre la verdad de los cincuenta años de terrorismo nacionalista que hemos padecido todos los españoles”.